Ruta por los Pueblos Blancos de Cádiz
Este verano nos propusimos conocer al máximo Cádiz y hacer una ruta en coche por la provincia. No solo visitando sus playas y sus pueblos costeros, sino también por la sierra de Grazalema. Y es que además de sus famosas playas y de su buen comer, Cádiz tiene un interior precioso, caracterizado por sus pueblos blancos y es ahí donde pusimos fin a nuestra ruta.
Son 19 los pueblos que conforman los Pueblos Blancos de Cádiz, pero nosotros solo visitamos 3 por tiempo y porque queríamos pasar los últimos días más relajados. Nos alojamos en una casita de Grazalema durante un fin de semana y desde allí cogimos el coche para visitar también Arcos de la Frontera y Zahara de la Sierra.
ARCOS DE LA FRONTERA
Es el pueblo que abre la ruta de los Pueblos Blancos de Cádiz. Está situado en lo alto de una montaña junto al río Guadalete, por lo que está llena de miradores desde donde se pueden observar panorámicas increíbles. No dejéis de visitar el mirador de la Plaza del Cabildo y el del Callejón de las Monjas.
Merece mucho la pena perderse entre sus laberínticas calles, blancas, repletas de macetas, que hacen que este pueblo sea denominado como uno de los más bonitos de España. Además, es un lugar perfecto para comer. Nosotros paramos en el Bar La Cárcel donde nos atendieron genial, por lo que os lo recomiendo 100%.
GRAZALEMA
Grazalema está situada en plena sierra, de hecho es uno de los enclaves perfectos para hacer múltiples rutas de senderismo y nosotros no podíamos irnos sin hacer alguna! Sin duda, una auténtica joya para los amantes de la naturaleza. Lo que más nos llamó la atención de este pueblo fue la tranquilidad que se respiraba. Apenas se apreciaba gente por sus empedradas calles, lejos del agobio de la costa de Cádiz en verano.
Es un pueblo que tiene una magia especial por su enclave, situado entre montañas, y por el ambiente que se respira: calles blancas de origen árabe donde parece que el tiempo se ha detenido. Y, por supuesto, no puedo dejar de mencionar su maravilloso queso de leche de cabra Payoya, ¡es el mejor souvenir que os podéis llevar de la zona!
Al estar alojados allí, prácticamente comimos y cenamos varios días en el pueblo. Al ser un pueblo tan pequeño, no son muchos los bares que hay para escoger, pero en todos comimos muy bien y muy barato.
ZAHARA DE LA SIERRA
Pusimos fin a nuestras vacaciones visitando este maravilloso pueblo. Desde el coche, entre curva y curva se puede ir apreciando sus casas blancas y el embalse de Zahara-El Gastor. A un lado del pueblo, se asoma la montaña y al otro este enorme embalse, todo ello vigilado por un Castillo, que os aconsejo visitar porque las vistas desde allí son preciosas. El pueblo está lleno de cuestas empinadas, pero todo se hace más agradable con las vistas que lo rodean.
